Los milicos en Argentina no son milicos
Ovidio obvio
Genocidio oculto en Argentina pedido de ayuda internacional
Solo son fuerzas de ocupación
Siempre se supo esto
Están con ricos que siempre tienen su plata en bancos
extranjeros, economía en negro, evasión de impuestos, corrupción, fuga de
capitales, paraísos fiscales últimamente, etc
Dicen ser pero no son argentinos, ni los ricos ni los
milicos
Veranean afuera, toda la plata afuera, parientes afuera,
salud afuera etc
Minorías sin patria y contra sus pueblos
Siempre con dictaduras y o genocidios y ahora en democracia
vaciada
No hay prensa libre fundamento de toda democracia, se
dedican a encubrir lo que roban y matan
Se sospecha que desde satélites persiguen gente sola,
opositores etc, a quien robar y matar sobre todo si están solos
Atacan en patotas y escondidos con fachadas y pantallas de familias, madres y padres de familias y
chicos , adolescentes, viejos y viejas, lumpenaje de comercios sucios como
verdulerías, supermercados chinos, lavaderos de autos etc
Tienen espías por todas partes y al que marcan pueden llegar
a matarlo con veneno variado a la manera de los Borgia
Matan todo el talento de este país y a los mejores políticos artistas economistas
periodistas etc
Son como emperadores romanos y Calígula en las sombras
Estos ricos y milicos como zares, nobles, depravados bien
vestidos no hacen anda en todo el día salvo ver por satélites a quienes robar y
matar
Dicen de la gente con poca familia como uno:
--Vive todavía con su familia, cuando se quede solo lo
matamos
Inmundas pendejas con pendejos bien vestidos con dinero de
muerte y robo amenazan así escondidos
Acechan desde casas y departamentos se cree a todos los
vecinos de todos los barrios
Son como una invasión nazi del propio país analfabetos nazis
sin saber que son nazis a falta de lecturas y estudio
Desprecian la ciencia y a los pobres y los trabajos simples,
traen todo importado y les importa nada dejar sin trabajo a millones
Desprecian la salud la educación el trabajo la comida y le
techo de todo los argentinos
Despreciar la ciencia la cultura y la educación lo va a
hundir, son castillos en el aire
Manipulan prejuicios y discriminación de toda sexualidad
cuando pueden ser los más gays y putas de todos
Destruyen la industria y pequeña empresa y mediana para
importar todo de afuera, desde el modelo agroexportador se sacan todos los
impuestos que puedan
Además evaden etc y vacían el estado y sus empresas
Privatizan todo lo que pueden y saquean el estado
Se roban todo dólar y todo peso y les hacen el trabajo sucio
a los ricos ladrones para eso
Por eso y más se cree que estos milicos son la
destrucción de este país con los ricos
más ladrones
Lacras de un país nación
y un pueblo destruidos en estos años
Han matado a los
mejores argentinos que son los mejores del mundo y han hecho un reino inmundo
de los peores argentinos que son los perores del mundo
Queda mucho de lo bueno del pasado y el recuerdo de los
muertos de todos y de los mejores
Se cree que debe haber esperanza
Esa gente tiene que guiar a todos
Y volver a ser la Argentina hermosa que se ha sido, la de
libertadores, federales, radicales, peronistas, socialistas, kirchneristas
28 diciembre 2018
Aconsejan no escribir contra los milicos y que van a matar
La verdad que no se tienen el coraje de Rodolfo Walsh pero es un ejemplo
Ni el de Alfonsín
Ni se quiere la prensa que da vergüenza de estos días en
Argentina de genocidio y dictadura
Walsh enfrento a 30 marinos cobardes armados con
ametralladores, él iba con un solo revolver
menor
El marino con un
rasguño del tiro de Walsh lo llamaron Héroe de Marina
Dan asco
Alfonsín enfrento a 3000 o algo así milicos de ejército
pintados para la guerra
Se comenta que le pegaron y casi lo matan
Cobardes
Fue a dejar que lo maten porque nos tomaron el pelo a todos,
los que debían reprimir nunca llegaron
Lo dejaron se comenta vivo para humillarlo
Los gurkhas cuentan que muchos de estos pedían como babosas
no ser matados
Con Alfonsín fueron muy valientes de a 3000 contra uno
o por ahí, y con tanto argentino
asesinado por estos tipos en estos años
Comentan gurhkas se cree haber oído que les da vergüenza no haberlos
matado por cómo ven por satélites como han matado miles de argentinos en estos
años
---
Abajo la Carta de Rodolfo Walsh a los genocidas de los 70
Se cree que datos más o datos menos están haciendo otro genocidio oculto
con democracia nula y meramente formal, vaciada y viciada
Son criminales y ladrones sobre todo nada más
El ejemplo de Walsh y Alfonsín sigue vigente y se espera no hacer el
mismo error
Si vienen de a 30 o de a 3000 con nuevas tecnologías y lo que se llama evolución utópica pedir ayuda el extranjero,
hacer un Nuremberg o parecidos pero en realidad no de nazis ---son delincuentes
comunes
Gente más seria de EEUU Alemania Inglaterra que por satélites y su ayuda
se encarguen de reprimir y juzgar sin estos genocidas en sus vergüenzas y sin
sus jueces comprados desde los millones de dólares que se cree varios PBI robados
por estas mafias desde 1955 sino antes a tantos argentinos asesinados por estas
bandas de delito común de estado saqueado
Nov 17
Rodolfo Walsh
Rodolfo Walsh (1927-1977). Escritor, periodista
argentino entre otras cosas fue un activo
militante político peronista que realizó una extraordinaria
radiografía del terrorismo de Estado instaurado entre 1976 y 1983 en su país.
Poco después de este análisis fue detenido-desaparecido.
Asombra
la información que había logrado recabar a pesar de
la férrea censura, lo que demuestra su lucidez y su capacidad
de investigación.
·
- Carta Abierta de un escritor a la Junta Militar
- 24 de marzo de 1977
Cadena Informativa es uno de los instrumentos que
está creando el pueblo argentino para romper el bloqueo de la información.
Cadena Informativa puede ser USTED MISMO, un instrumento para que usted se
libere del terror y libere a otros del terror. Reproduzca esta información,
hágala circular por los medios a su alcance: a mano, a máquina, a mimeógrafo.
Mande copias a sus amigos: nueve de cada diez las estarán esperando. Millones
quieren ser informados.
El terror se basa en la incomunicación. Vuelva a
sentir la satisfacción moral de un acto de libertad. Derrote al Miedo.
I
La censura de prensa, la persecución a
intelectuales, el allanamiento de mi casa en el Tigre, el asesinato de amigos
queridos y la pérdida de una hija que murió combatiéndolos, son algunos de los
hechos que me obligan a esta forma de expresión clandestina después de haber
opinado libremente como escritor y periodista durante casi treinta años. El
primer aniversario de esta Junta Militar ha motivado un balance de la acción de
gobierno en documentos y discursos oficiales, donde lo que ustedes llaman
aciertos son errores, los que reconocen como errores son crímenes y lo que
omiten son calamidades. El 24 de marzo de 1976 derrocaron ustedes a un gobierno
del que formaban parte, a cuyo desprestigio contribuyeron como ejecutores de su
política represiva, y cuyo término estaba señalado por elecciones convocadas
para nueve meses más tarde. En esa perspectiva lo que ustedes liquidaron no fue
el mandato transitorio de Isabel Martínez sino la posibilidad de un proceso
democrático donde el pueblo remediara males que ustedes continuaron y
agravaron. Ilegítimo en su origen, el gobierno que ustedes ejercen pudo legitimarse
en los hechos recuperando el programa en que coincidieron en las elecciones de
1973 el ochenta por ciento de los argentinos y que sigue en pie como expresión
objetiva de la voluntad del pueblo, único significado posible de ese “ser
nacional” que ustedes invocan tan a menudo. Invirtiendo ese camino han
restaurado ustedes la corriente de ideas e intereses de minorías derrotadas que
traban el desarrollo de las fuerzas productivas, explotan al pueblo y disgregan
la Nación. Una política semejante sólo puede imponerse transitoriamente
prohibiendo los partidos, interviniendo los sindicatos, amordazando la prensa e
implantando el terror más profundo que ha conocido la sociedad Argentina.
II
Quince mil desaparecidos, diez mil presos, cuatro
mil muertos, decenas de miles de desterrados son la cifra desnuda de ese
terror. Colmadas las cárceles ordinarias, crearon ustedes en las principales
guarniciones del país virtuales campos de concentración donde no entra ningún
juez, abogado, periodista, observador internacional. El secreto militar de los
procedimientos, invocado como necesidad de la investigación, convierte a la
mayoría de las detenciones en secuestros que permiten la tortura sin límite y
el fusilamiento sin juicio. 1 Más de siete mil recursos de hábeas
corpus han sido contestados negativamente este último año. En otros miles de
casos de desaparición el recurso ni siquiera se ha presentado porque se conoce
de antemano su inutilidad o porque no se encuentra abogado que ose presentarlo
después que los cincuenta o sesenta que lo hacían fueron a su turno
secuestrados. De este modo han despojado ustedes a la tortura de su límite en
el tiempo. Como el detenido no existe, no hay posibilidad de presentarlo al
juez en diez días según manda un ley que fue respetada aún en las cumbres
represivas de anteriores dictaduras. La falta de límite en el tiempo ha sido
complementada con la falta de límite en los métodos, retrocediendo a épocas en
que se operó directamente sobre las articulaciones y las vísceras de las
víctimas, ahora con auxiliares quirúrgicos y farmacológicos de que no
dispusieron los antiguos verdugos. El potro, el torno, el despellejamiento en
vida, la sierra de los inquisidores medievales reaparecen en los testimonios junto
con la picana y el “submarino”, el soplete de las actualizaciones
contemporáneas. 2 Mediante sucesivas concesiones al
supuesto de que el fin de exterminar a la guerrilla justifica todos los medios
que usan, han llegado ustedes a la tortura absoluta, intemporal, metafísica en
la medida que el fin original de obtener información se extravía en las mentes
perturbadas que la administran para ceder al impulso de machacar la sustancia
humana hasta quebrarla y hacerle perder la dignidad que perdió el verdugo, que
ustedes mismos han perdido.
III
La negativa de esa Junta a publicar los nombres de
los prisioneros es asimismo la cobertura de una sistemática ejecución de
rehenes en lugares descampados y horas de la madrugada con el pretexto de
fraguados combates e imaginarias tentativas de fuga. Extremistas que panfletean
el campo, pintan acequias o se amontonan de a diez en vehículos que se
incendian son los estereotipos de un libreto que no está hecho para ser creído
sino para burlar la reacción internacional ante ejecuciones en regla mientras
en lo interno se subraya el carácter de represalias desatadas en los mismos
lugares y en fecha inmediata a las acciones guerrilleras. Setenta fusilados
tras la bomba en Seguridad Federal, 55 en respuesta a la voladura del
Departamento de Policía de La Plata, 30 por el atentado en el Ministerio de
Defensa, 40 en la Masacre del Año Nuevo que siguió a la muerte del coronel
Castellanos, 19 tras la explosión que destruyó la comisaría de Ciudadela forman
parte de 1.200 ejecuciones en 300 supuestos combates donde el oponente no tuvo
heridos y las fuerzas a su mando no tuvieron muertos. Depositarios de una culpa
colectiva abolida en las normas civilizadas de justicia, incapaces de influir
en la política que dicta los hechos por los cuales son reprimidos, muchos de
esos rehenes son delegados sindicales, intelectuales, familiares de
guerrilleros, opositores no armados, simples sospechosos a los que se mata para
equilibrar la balanza de las bajas según la doctrina extranjera de
“cuenta-cadáveres” que usaron los SS en los países ocupados y los invasores en
Vietnam. El remate de guerrilleros heridos o capturados en combates reales es
asimismo una evidencia que surge de los comunicados militares que en un año
atribuyeron a la guerrilla 600 muertos y sólo 10 ó 15 heridos, proporción
desconocida en los más encarnizados conflictos. Esta impresión es confirmada
por un muestreo periodístico de circulación clandestina que revela que entre el
18 de diciembre de 1976 y el 3 de febrero de 1977, en 40 acciones reales, las
fuerzas legales tuvieron 23 muertos y 40 heridos, y la guerrilla 63
muertos. 3Más de cien procesados han sido igualmente
abatidos en tentativas de fuga cuyo relato oficial tampoco está destinado a que
alguien lo crea sino a prevenir a la guerrilla y Ios partidos de que aún los
presos reconocidos son la reserva estratégica de las represalias de que
disponen los Comandantes de Cuerpo según la marcha de los combates, la
conveniencia didáctica o el humor del momento. Así ha ganado sus laureles el
general Benjamín Menéndez, jefe del Tercer Cuerpo de Ejército, antes del 24 de
marzo con el asesinato de Marcos Osatinsky, detenido en Córdoba, después con la
muerte de Hugo Vaca Narvaja y otros cincuenta prisioneros en variadas
aplicaciones de la ley de fuga ejecutadas sin piedad y narradas sin
pudor. 4El asesinato de Dardo Cabo, detenido en
abril de 1975, fusilado el 6 de enero de 1977 con otros siete prisioneros en
jurisdicción del Primer Cuerpo de Ejército que manda el general Suárez Masson,
revela que estos episodios no son desbordes de algunos centuriones alucinados
sino la política misma que ustedes planifican en sus estados mayores, discuten
en sus reuniones de gabinete, imponen como comandantes en jefe de las 3 Armas y
aprueban como miembros de la Junta de Gobierno.
IV
Entre mil quinientas y tres mil personas han sido
masacradas en secreto después que ustedes prohibieron informar sobre hallazgos
de cadáveres que en algunos casos han trascendido, sin embargo, por afectar a
otros países, por su magnitud genocida o por el espanto provocado entre sus
propias fuerzas. 5 Veinticinco cuerpos mutilados afloraron
entre marzo y octubre de 1976 en las costas uruguayas, pequeña parte quizás del
cargamento de torturados hasta la muerte en la Escuela de Mecánica de la
Armada, fondeados en el Río de la Plata por buques de esa fuerza, incluyendo el
chico de 15 años, Floreal Avellaneda, atado de pies y manos, “con lastimaduras
en la región anal y fracturas visibles” según su autopsia. Un verdadero
cementerio lacustre descubrió en agosto de 1976 un vecino que buceaba en el
Lago San Roque de Córdoba, acudió a la comisaría donde no le recibieron la
denuncia y escribió a los diarios que no la publicaron. 6 Treinta y cuatro cadáveres en Buenos
Aires entre el 3 y el 9 de abril de 1976, ocho en San Telmo el 4 de julio, diez
en el Río Luján el 9 de octubre, sirven de marco a las masacres del 20 de
agosto que apilaron 30 muertos a 15 kilómetros de Campo de Mayo y 17 en Lomas
de Zamora. En esos enunciados se agota la ficción de bandas de derecha,
presuntas herederas de las 3 A de López Rega, capaces dc atravesar la mayor
guarnición del país en camiones militares, de alfombrar de muertos el Río de la
Plata o de arrojar prisioneros al mar desde los transportes de la Primera
Brigada Aérea 7 La misma continuidad histórica liga el
asesinato del general Carlos Prats, durante el anterior gobierno, con el
secuestro y muerte del general Juan José Torres, Zelmar Michelini, Héctor
Gutiérrez Ruíz y decenas de asilados en quienes se ha querido asesinar la
posibilidad de procesos democráticos en Chile, Boliva y Uruguay. 8 La segura participación en esos crímenes
del Departamento de Asuntos Extranjeros de la Policía Federal, conducido por
oficiales becados de la CIA a través de la AID, como los comisarios Juan Gattei
y Antonio Gettor, sometidos ellos mismos a la autoridad de Mr. Gardener
Hathaway, Station Chief de la CIA en Argentina, es semillero de futuras
revelaciones como las que hoy sacuden a la comunidad internacional que no han
de agotarse siquiera cuando se esclarezcan el papel de esa agencia y de altos
jefes del Ejército, encabezados por el general Menéndez, en la creación de la
Logia Libertadores de América, que reemplazó a las 3 A hasta que su papel
global fue asumido por esa Junta en nombre de las 3 Armas. Este cuadro de
exterminio no excluye siquiera el arreglo personal de cuentas como el asesinato
del capitán Horacio Gándara, quien desde hace una década investigaba los
negociados de altos jefes de la Marina, o del periodista de “Prensa Libre”
Horacio Novillo apuñalado y calcinado, después que ese diario denunció las
conexiones del ministro Martínez de Hoz con monopolios internacionales. A la
luz de estos episodios cobra su significado final la definición de la guerra pronunciada
por uno de sus jefes: “La lucha que libramos no reconoce límites morales ni
naturales, se realiza más allá del bien y del mal”. 9
El periodista uruguayo Zelmar Michelini fue senador
por el Frente Amplio, fue secuestrado y detenido-desaparecido en 1976.
V
Estos hechos, que sacuden la conciencia del mundo
civilizado, no son sin embargo los que mayores sufrimientos han traído al
pueblo argentino ni las peores violaciones de los derechos humanos en que
ustedes incurren. En la política económica de ese gobierno debe buscarse no
sólo la explicación de sus crímenes sino una atrocidad mayor que castiga a
millones de seres humanos con la miseria planificada. En un año han reducido
ustedes el salario real de los trabajadores al 40%, disminuido su participación
en el ingreso nacional al 30%, elevado de 6 a 18 horas la jornada de labor que
necesita un obrero para pagar la canasta familiar, 10 resucitando así formas de trabajo
forzado que no persisten ni en los últimos reductos coloniales. Congelando
salarios a culatazos mientras los precios suben en las puntas de las bayonetas,
aboliendo toda forma de reclamación colectiva, prohibiendo asambleas y
comisiones internas, alargando horarios, elevando la desocupación al récord del
9% 11 prometiendo aumentarla con 300.000
nuevos despidos, han retrotraído las relaciones de producción a los comienzos
de la era industrial, y cuando los trabajadores han querido protestar los han
calificados de subversivos, secuestrando cuerpos enteros de delegados que en
algunos casos aparecieron muertos, y en otros no aparecieron. 12 Los resultados de esa política han sido
fulminantes. En este primer año de gobierno el consumo de alimentos ha
disminuido el 40%, el de ropa más del 50%, el de medicinas ha desaparecido
prácticamente en las capas populares. Ya hay zonas del Gran Buenos Aires donde
la mortalidad infantil supera el 30%, cifra que nos iguala con Rhodesia,
Dahomey o las Guayanas; enfermedades como la diarrea estival, las parasitosis y
hasta la rabia en que las cifras trepan hacia marcas mundiales o las superan.
Como si esas fueran metas deseadas y buscadas, han reducido ustedes el
presupuesto de la salud pública a menos de un tercio de los gastos militares,
suprimiendo hasta los hospitales gratuitos mientras centenares de médicos,
profesionales y técnicos se suman al éxodo provocado por el terror, los bajos
sueldos o la “racionalización”. Basta andar unas horas por el Gran Buenos Aires
para comprobar la rapidez con que semejante política la convirtió en una villa
miseria de diez millones de habitantes. Ciudades a media luz, barrios enteros
sin agua porque las industrias monopólicas saquean las napas subterráneas,
millares de cuadras convertidas en un solo bache porque ustedes sólo pavimentan
los barrios militares y adornan la Plaza de Mayo , el río más grande del mundo
contaminado en todas sus playas porque los socios del ministro Martínez de Hoz
arrojan en él sus residuos industriales, y la única medida de gobierno que
ustedes han tomado es prohibir a la gente que se bañe. Tampoco en las metas
abstractas de la economía, a las que suelen llamar “el país”, han sido ustedes
más afortunados. Un descenso del producto bruto que orilla el 3%, una deuda
exterior que alcanza a 600 dólares por habitante, una inflación anual del 400%,
un aumento del circulante que en solo una semana de diciembre llegó al 9%, una
baja del 13% en la inversión externa constituyen también marcas mundiales, raro
fruto de la fría deliberación y la cruda inepcia. Mientras todas las funciones
creadoras y protectoras del Estado se atrofian hasta disolverse en la pura
anemia, una sola crece y se vuelve autónoma. Mil ochocientos millones de
dólares que equivalen a la mitad de las exportaciones argentinas presupuestados
para Seguridad y Defensa en 1977, cuatro mil nuevas plazas de agentes en la Policía
Federal, doce mil en la provincia de Buenos Aires con sueldos que duplican el
de un obrero industrial y triplican el de un director de escuela, mientras en
secreto se elevan los propios sueldos militares a partir de febrero en un 120%,
prueban que no hay congelación ni desocupación en el reino de la tortura y de
la muerte, único campo de la actividad argentina donde el producto crece y
donde la cotización por guerrillero abatido sube más rápido que el dólar.
José Alfredo Martínez de Hoz Ministro de Economía,
junto al dictador Jorge Rafael Videla.
VI
Dictada por el Fondo Monetario Internacional según
una receta que se aplica indistintamente al Zaire o a Chile, a Uruguay o
Indonesia, la política económica de esa Junta sólo reconoce como beneficiarios
a la vieja oligarquía ganadera, la nueva oligarquía especuladora y un grupo
selecto de monopolios internacionales encabezados por la ITT, la Esso, las
automotrices, la U.S.Steel, la Siemens, al que están ligados personalmente el
ministro Martínez de Hoz y todos los miembros de su gabinete. Un aumento del
722% en los precios de la producción animal en 1976 define la magnitud de la
restauración oligárquica emprendida por Martínez de Hoz en consonancia con el
credo de la Sociedad Rural expuesto por su presidente Celedonio Pereda: “Llena
de asombro que ciertos grupos pequeños pero activos sigan insistiendo en que
los alimentos deben ser baratos”. 13 El espectáculo de una Bolsa de Comercio
donde en una semana ha sido posible para algunos ganar sin trabajar el cien y
el doscientos por ciento, donde hay empresas que de la noche a la mañana
duplicaron su capital sin producir más que antes, la rueda loca de la
especulación en dólares, letras, valores ajustables, la usura simple que ya
calcula el interés por hora, son hechos bien curiosos bajo un gobierno que
venía a acabar con el “festín de los corruptos”. Desnacionalizando bancos se
ponen el ahorro y el crédito nacional en manos de la banca extranjera,
indemnizando a la ITT y a la Siemens se premia a empresas que estafaron al
Estado, devolviendo las bocas de expendio se aumentan las ganancias de la Shell
y la Esso, rebajando los aranceles aduaneros se crean empleos en Hong Kong o
Singapur y desocupación en la Argentina. Frente al conjunto de esos hechos cabe
preguntarse quiénes son los apátridas de los comunicados oficiales, dónde están
los mercenarios al servicio de intereses foráneos, cuál es la ideología que
amenaza al ser nacional.
Si una propaganda abrumadora, reflejo deforme de
hechos malvados no pretendiera que esa Junta procura la paz, que el general
Videla defiende los derechos humanos o que el almirante Massera ama la vida,
aún cabría pedir a los señores Comandantes en Jefe de las 3 Armas que meditaran
sobre el abismo al que conducen al país tras la ilusión de ganar una guerra
que, aún si mataran al último guerrillero, no haría más que empezar bajo nuevas
formas, porque las causas que hace más de veinte años mueven la resistencia del
pueblo argentino no estarán desaparecidas sino agravadas por el recuerdo del
estrago causado y la revelación de las atrocidades cometidas.
Emilio Eduardo Massera y Jorge Rafael Videla
miembros de la Junta Militar que tomo el poder por la fuerza el 24 de marzo de
1976 en la Argentina.
Estas son las reflexiones que en el primer
aniversario de su infausto gobierno he querido hacer llegar a los miembros de
esa Junta, sin esperanza de ser escuchado, con la certeza de ser perseguido,
pero fiel al compromiso que asumí hace mucho tiempo de dar testimonio en
momentos difíciles.
Rodolfo Walsh. – C.I. 2845022
NOTAS
- Desde enero de 1977 la Junta empezó a publicar nóminas incompletas de nuevos detenidos y de “liberados” que en su mayoría no son tales sino procesados que dejan de estar a su disposición pero siguen presos. Los nombres de millares de prisioneros son aún secreto militar y las condiciones para su tortura y posterior fusilamiento permanecen intactas.
- El dirigente peronista Jorge Lizaso fue despellejado en vida, el ex diputado radical Mario Amaya muerto a palos, el ex diputado Muñiz Barreto desnucado de un golpe. Testimonio de una sobreviviente: “Picana en Ios brazos, las manos, los muslos, cerca de Ia boca cada vez que lloraba o rezaba… Cada veinte minutos abrían la puerta y me decían que me iban hacer fiambre con la máquina de sierra que se escuchaba”.
- “Cadena Informativa”, mensaje Nro. 4, febrero de 1977
- Una versión exacta aparece en esta carta de los presos en la Cárcel de Encausados al obispo de Córdoba, monseñor Primatesta: “El 17 de mayo son retirados con el engaño de ir a la enfermería seis compañeros que luego son fusilados. Se trata de Miguel Angel Mosse, José Svagusa, Diana Fidelman, Luis Verón, Ricardo Yung y Eduardo Hernández, de cuya muerte en un intento de fuga informó el Tercer Cuerpo de Ejército. El 29 de mayo son retirados José Pucheta y Carlos Sgadurra. Este úItimo había sido castigado al punto de que no se podía mantener en pie sufriendo varias fracturas de miembros. Luego aparecen también fusilados en un intento de fuga”.
- En los primeros 15 días de gobierno militar aparecieron 63 cadáveres, según los diarios. Una proyección anual da la cifra de 1500. La presunción de que puede ascender al doble se funda en que desde enero de 1976 la información periodística era incompleta y en el aumento global de la represión después del golpe. Una estimación global verosímil de las muertes producidas por la Junta es la siguiente. Muertos en combate: 600. Fusilados: 1.300. Ejecutados en secreto: 2.000. Varios. 100. Total: 4.000.
- Carta de Isaías Zanotti, difundida por ANCLA, Agencia Clandestina de Noticias.
- “Programa” dirigido entre julio y diciembre de 1976 por el brigadier Mariani, jefe de la Primera Brigada Aérea del Palomar. Se usaron transportes Fokker F-27. , sin que se enteren el general Videla, el almirante Massera o el brigadier Agosti. Las 3 A son hoy las 3 Armas, y la Junta que ustedes presiden no es el fiel de la balanza entre “violencias de distintos signos” ni el árbitro justo entre “dos terrorismos”, sino la fuente misma del terror que ha perdido el rumbo y sólo puede balbucear el discurso de la muerte. El canciller vicealmirante Guzzeti en reportaje publicado por “La Opinión” el 3-10-76 admitió que “el terrorismo de derecha no es tal” sino “un anticuerpo”.
- El general Prats, último ministro de Ejército del presidente Allende, muerto por una bomba en setiembre de 1974. Los ex parlamentarios uruguayos Michelini y Gutiérrez Ruiz aparecieron acribillados el 2-5-76. El cadáver del general Torres, ex presidente de Bolivia, apareció el 2-6-76, después que el ministro del Interior y ex jefe de Policía de Isabel Martínez, general Harguindeguy, lo acusó de “simular” su secuestro.
- Teniente Coronel Hugo Ildebrando Pascarelli según “La Razón” del 12-6-76. Jefe del Grupo I de Artillería de Ciudadela. Pascarelli es el presunto responsable de 33 fusilamientos entre el 5 de enero y el 3 de febrero de 1977.
- Unión de Bancos Suizos, dato correspondiente a junio de 1976. Después la situación se agravó aún más.
- Diario “Clarín”.
- Entre los dirigentes nacionales secuestrados se cuentan Mario Aguirre de ATE, Jorge Di Pasquale de Farmacia, Oscar Smith de Luz y Fuerza. Los secuestros y asesinatos de delegados han sido particularmente graves en metalúrgicos y navales.
- Prensa Libre, 16-12-76.
ANEXO DE ARIADNA TUCMA
María Estela Martínez de Perón (1974-1976) asumió
la presidencia argentina tras la muerte de Juan Domingo Perón. Con grandes
contradicciones internas y sumamente debilitada fue derrocada el 24 de marzo de
1976.
Los medios de comunicación acompañaron el
Golpe de Estado como puede observarse en distintos medios de la ciudad de
Buenos Aires.
Jacobo Timerman fundó el diario
La Opinión en 1971. Estuvo detenido-desaparecido luego de ser
secuestrado en 1977 y 1980 cuando pudo partir al exilio. A su retorno colaboró
con la investigacion sobre terrorismo de Estado de la Comisión Nacional
sobre Desaparición de Personas (CONADEP, 1984) y en el juicio a las Juntas
(1985)
La persecución y exterminio del
periodismo independiente y/ o militante se dio antes del golpe de 1976 con
el accionar de la Triple A (Alianza Anticomunista Argentina). Luego con
los secuestros de detenidos-desaparecidos o asesinados suman más de un
centenar de periodistas de medios gráficos de todo el pais
como Claudio Adur, Horacio Agulla, Juan José María Ascone, Pedro Leopoldo
Barraza, Oscar Osvaldo Barros, Aldo Néstor Casadidio, Haroldo Pedro Conti,
Daniel Alberto Danquen, Dardo Sebastián Dorronzoro, Alicia Graciana Eguren de
Cooke, Luis Alberto Fabri, Marcelo Ariel Gelman, Raymundo Gleyzer, Alberto
Jorge Gorrini, Luis Rodolfo Guagnini, Diana Griselda Guerrero, Juan Carlos Higa,
Ignacio Ikonicoff, Maurice Jeger, Mabel Kitzler de Domínguez – diario El Mundo,
Alfredo Kolliker Frers, Miguel Francisco Lizaso, Susana Lugones, Heraldo Juan
Marucco, Marta Mastrogiacomo, Zelmar Michelini, Liliana Molteni, Rodolfo Ortega
Peña, Carlos Alberto Pérez, Rafael Perrota, José Eduardo Ramos, Edgardo
Sajón, Juan Miguel Satragno, Elías Seman, Juan Marcelo Soler Guinard, Eduardo
Suárez, Francisco Urondo, María Victoria Walsh, Miguel Angel Zavala Rodríguez,
Publicado
por ADHILAC Internacional © www.adhilac.com.ar